Adecuaremos la Ley de Asociaciones Sindicales al Convenio N°87 de la Organización Internacional del Trabajo. Iremos hacia un modelo sindical plural, que respete la libertad de agremiación y profundice la democracia interna, promoviendo la más amplia participación de los trabajadores en estas organizaciones.
Pleno reconocimiento de todas las organizaciones gremiales y en particular de la Central de los Trabajadores Argentinos.
Será la Justicia del Trabajo y no el Ministerio del ramo quien intervenga en las disputas electorales, atento su carácter de órgano independiente e imparcial.
Reemplazaremos el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil por un Consejo Nacional de Relaciones del Trabajo, con integración tripartita y federal, donde se incluyan, además de la cuestión salarial, todos los aspectos que hacen a una condición de trabajo decente.
Fortalecimiento de la negociación colectiva como herramienta de democratización de las relaciones laborales y su ampliación a distintos ámbitos y temáticas.