Abogada – Política – Diputada Nacional

«Las Fuerzas Armadas no están para combatir al narcotráfico»

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Foto: Marcelo Bustamante / La Capital

La diputada nacional del GEN, Margarita Stolbizer, se diferenció de Bullrich y dijo que las declaraciones de Carrió sobre los vínculos del frente de frentes con el narcotráfico tienen «mala intención»

Para la diputada nacional Margarita Stolbizer la propuesta de Patricia Bullrich y otros dirigentes opositores de modificar el marco legal para que las Fuerzas Armadas puedan intervenir en el combate al narcotráfico “es un ejemplo de una respuesta simplista a un problema complejo”. México y Colombia lo intentaron y fracasaron, advierte Stolbizer, que se reunió este martes con el intendente de Rosario, Pablo Javkin.

En diálogo con La Capital, la principal dirigente del GEN dijo que la acusación de Elisa Carrió respecto a los supuestos vínculos de sectores del frente de frentes con el narcotráfico tiene “mala intención” y apunta a obtener lugares en las listas, advirtió que los candidatos de Juntos y del Frente de Todos están más pendientes del debate interno y en “ver qué frase fuerte pueden decir” y señaló que “hay un final ya escrito para el kirchnerismo”.

—¿Cómo ve la situación de Rosario y Santa Fe, en particular la cuestión de la violencia?

—Si bien entiendo la gravedad que tiene la situación particular en Rosario, tengo la convicción de que no se trata de un problema estrictamente local. Por lo tanto, las respuestas nunca pueden ser estrictamente locales. Por otro lado, estamos hablando de la actividad de organizaciones criminales y del delito complejo, y las respuestas deben ser tan complejas como son los crímenes. Esto significa que hay que salir de las propuestas espontáneas y que no tengan que ver con un plan integral. Lamentablemente, en Rosario vemos una disputa de bandas que han ganado el territorio, que pone en evidencia la ineficacia del Estado. En este tiempo muchos discuten sobre el tamaño del Estado y nosotros insistimos en que lo que hay que discutir son las capacidades estatales. Esta es una de las pruebas de que el Estado debe tener los recursos suficientes para atender los problemas. Otra cuestión en relación a este tipo de delitos es que tenemos que empezar a usar la tecnología y la inteligencia artificial como herramientas para que el Estado no vaya, como siempre, por detrás de los acontecimientos.

—¿Cómo podría utilizarse la inteligencia artificial en este caso?

—Hay que mirar a otros países. Hoy la inteligencia artificial se utiliza, entre otras cosas, para fabricar armas autónomas. Estoy en absoluto desacuerdo y creo que deberían prohibirse, pero hay sistemas de drones que no tienen capacidad de ataque, pero sí de detectar determinadas cosas. Sin ir más lejos, los escáneres que en Europa detectan la droga que llega por contrabando de lugares como la Argentina, donde nadie detecta nada. La tecnología es muy importante, pero necesitamos apostar también a una integridad del funcionariado. La corrupción siempre causa mucho daño: si no hubiera complicidades en áreas claves, como la policía, la Justicia y las aduanas, estos delitos no se podrían cometer. Fallan los sistemas de transparencia del Estado que deberían actuar.

—En Juntos por el Cambio hay dirigentes como Patricia Bullrich que plantean modificar la normativa para que las Fuerzas Armadas puedan intervenir más activamente en el combate al narcotráfico, ¿cuál es su opinión?

—No lo comparto. Es un ejemplo de una respuesta simplista a un problema complejo. La militarización de las fuerzas de seguridad no es buena consejera, porque tenemos experiencias más que suficientes del fracaso de lo que esto ha sido en países como México, donde las Fuerzas Armadas tienen la posibilidad de perseguir el narcotráfico. En Colombia pasó exactamente lo mismo. El resultado es muchas más violaciones a los derechos humanos y mucha mayor complejidad. Nosotros insistimos en la necesidad de un plan integral: no se trata simplemente de fuerzas de seguridad persiguiendo delincuentes; queremos atacar la economía del delito, ver cómo hacemos para perseguir esas cuevas donde las organizaciones criminales pueden seguir escondiendo su dinero. Mientras la Argentina no tenga un control sobre el dinero que va desde y hacia los paraísos fiscales y se siga pudiendo hacer esto con absoluta libertad, sin que haya un control sobre los reportes de las operaciones financieras de las organizaciones criminales, va a ser muy difícil enfrentar esto, por más Ejército que pongamos. Por último, las Fuerzas Armadas no están preparadas para hacer eso. Deberíamos trabajar en capacitar a las fuerzas de seguridad o en fuerzas especiales para hacerse cargo de la lucha del narcotráfico, pero no en las Fuerzas Armadas, que están diseñadas para defender las fronteras y otras tareas.

—¿Cómo está viendo el escenario político de Santa Fe?

—Santa Fe no escapa al enredo y la incertidumbre general que tiene el escenario político nacional. Lo que veo un poco desde afuera es que hay una gestión provincial que ha fracasado en todos los objetivos que se planteó. Y, por lo tanto, esto abre una expectativa muy importante para que la oposición se piense realmente con chance de ser gobierno. Esto no es distinto a lo que pasa a nivel nacional, donde las expectativas que habían generado el gobierno de Fernández y la llegada de Massa se han frustrado. El gobierno está prácticamente en retirada y no ha acertado en atender las problemáticas más importantes. Tanto en el plano nacional como en la provincia el desafío principal que tienen las fuerzas políticas de la oposición es recuperar credibilidad y la confianza de la sociedad en la política. Por lo tanto, lo que hay que hacer es prepararse para el desafío de llegar a gobernar.

—El fin de semana Carrió hizo acusaciones muy fuertes sobre el nuevo frente opositor que se está armando en Santa Fe, relacionando a sectores políticos con el narcotráfico. ¿Cuál es su opinión sobre esas declaraciones?

—No comparto. Hasta me parece de mala intención que plantee que como no le dan los lugares que quiere en una lista son todos narcotraficantes. Si le daban los lugares no eran tan malos y sí lo son porque no se los dan. No se puede admitir de ninguna manera. Ella ya ha tenido antes expresiones de este tipo y no las compartimos. Ni como diagnóstico ni mucho menos, como especulación para obtener algo.

Con @monicacperalta entregamos al Intendente @pablojavkin proyectos para provincia y Nación como parte d un plan integral p/abordar tema narcotráfico. Fortalecer justicia federal, apuntar al lavado y economía del delito,control en rutas e hidrovía. Estado eficiente y transparente pic.twitter.com/iJdL6Gyr7y— Margarita Stolbizer (@Stolbizer) March 21, 2023

—La llevo al plano nacional. Estamos en zona de definición de candidaturas, ¿cómo ve el escenario de Juntos?

—Juntos atraviesa una situación bastante parecida a la de la coalición que gobierno. Hay una discusión que tiene que ver con lo endogámico, con lo interno, que con una discusión hacia afuera. Como decía antes, el desafío que hoy tiene Juntos es recuperar un marco de confianza y credibilidad. Eso se hace discutiendo seriamente un plan de gobierno sobre cómo resolver los problemas. En el gobierno de Cambiemos, del que no formamos parte, subestimaron el problema de la inflación y terminamos peor de cómo había empezado. Me da alguna tranquilidad que he estado en reuniones con los equipos técnicos y los veo trabajando con una seriedad que debería ser trasladada al marco de los candidatos, que están más en ver qué frase fuerte pueden decir. La sociedad no necesita frases de impacto, sino un plan de estabilización, que es lo que la Argentina necesita para recuperar crecimiento, credibilidad, inserción internacional. ¿Quién invierte en un país que tiene diez tipos distintos de dólar, una inflación al 100% anual y el cambio de reglas de juegos permanente? Es imposible. Que no haya inversión, tanto extranjera como local, es menos producción y menos generación de empleo, y, por lo tanto, más pobreza. Esa es la radiografía de la Argentina de hoy.

—Este lunes estuvo Macri en Rosario, ¿cree que va a ser candidato?

—Creo que pocos deben saber qué está buscando. Sin duda, él está poniendo en valor un liderazgo que tiene en su fuerza política, que es el PRO. Obviamente, nosotros no desconocemos esta situación, pero cualquier decisión deberá formar parte de una discusión de Juntos por el Cambio. Nosotros buscamos que en caso de llegar al gobierno la coalición funcione como tal. Eso no pasó en el gobierno de Cambiemos e hizo que se cometieran errores. Hoy los demás partidos de la coalición tenemos otra vocación de participación, para que no haya liderazgos tan excluyentes. Sería malo si pensamos en las complejidades que va a recibir el nuevo gobierno, mucho peores que las de 2015.

—Hasta ahora, la principal hipótesis es un balotaje entre Juntos y el Frente de Todos. ¿Puede meterse Milei en una segunda vuelta si se sigue deteriorando la situación económica?

—Atrás de Milei hay una protesta más antisistema que lo que tiene que ver con sus propias ideas. Creo que cuando llegue el momento de votar, y ojalá no fuera así, la gente termina votando para que no gane el otro. Ahí es donde una opción diferente como la de Milei puede terminar sin el resultado electoral que pretende. Me da la impresión de que hoy no tiene chance de ingresar en un balotaje.

—¿Observa a Cristina y al kirchnerismo en una etapa de declive final?

—Tengo una mirada muy crítica del gobierno y del papel de Cristina. La falta de resolución y la agudización en algunos casos de los principales problemas de la Argentina es por la responsabilidad, o la irresponsabilidad, de la decisión que ella tomó en su momento de poner a Alberto Fernández en la fórmula y no darle las libertades necesarias para que él pudiera ejercer la magistratura. Quizás él no tuvo las capacidades para poder hacerlo, pero hay un fracaso contundente. Por lo tanto, tenemos que pensar que hay un final ya escrito para el kirchnerismo. A esto se suma, por supuesto, la situación particular y personal de Cristina Fernández. Esa es su mayor preocupación: su relación con la Justicia. Tiene una condena que no está firme, que no le impide presentarse como candidata para ningún cargo, pero es una condena por corrupción. También tiene otras causas pendientes en el mismo sentido. Esto no puede no afectarla a ella y a su movimiento político.

Fuente La Capital