22/09/2015.
La Candidata a la Presidencia de la Nación por PROGRESISTAS, Margarita Stolbizer se refirió al proyecto impulsado por el oficialismo para declarar de interés público la protección de las participaciones accionarias o de capital de empresas donde el Estado Nacional sea socio o donde el Ministerio de Economía posea tenencias accionarias o de capital.
«Es descabellado que el kirchnerismo ponga este tema en agenda a 60 días de terminar su mandato. Deberían tener un mínimo de consideración sobre la etapa final de gestión que están atravesando para frenar su permanente impulso abusivo de su condición de mayoría. Perderán esa condición en pocos días y entonces lo único que les interesa es seguir creando organismos, nombrando amigos en cargos claves y perturbar la gestión del gobierno que los suceda, aunque sea de su mismo frente. No hay en el proyecto ninguna discusión estratégica sobre el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de ANSES y es mentira que con su aprobación se protege ese fondo. Las inversiones en empresas privadas del FGS representan solo el 11,6% del total. Si el proyecto tuviera realmente como objetivo preservar la sustentabilidad del Fondo dando participación al Congreso para evitar que se disponga de sus activos, le daría participación para decidir sobre la totalidad y no solo sobre ese mínimo porcentaje de ser garante.»
Stolbizer, junto a la diputada Alicia Ciciliani presentaron un dictamen de rechazo del proyecto. «Cuando hablamos de privatizar estamos aludiendo al hecho de pasar a manos privadas asuntos que estratégicamente debieran permanecer en manos públicas estatales a riesgo de perder el control sobre bienes o servicios que hacen a la protección y conservación del bien común. Privatizar no alude tanto al régimen de propiedad como a la pérdida de control de parte del estado de aspectos vinculados al bien común de los cuales debe ser garante. Se descontextualiza por ser una falacia argumentativa. Ya que las empresas son privadas y la participación del estado no deja de ser sobre esa calidad de origen de las acciones.»
Una vez más, por detrás de los grandes títulos y la careta de las buenas intenciones se esconde el relato y el intento de manipulación del estado como un botín de la política, que nada tiene que ver con el fin último y principal que debe ser siempre el bien común.